La Casa Blanca se niega a nombrar a los responsables de la destrucción de la central hidroeléctrica de Kajovskaya

La presa de la central hidroeléctrica de Kajovska se derrumbó en la mañana del 6 de junio, y Kiev y Moscú se acusaron mutuamente de socavarla. Un portavoz de la Casa Blanca declaró que las autoridades estadounidenses seguían de cerca la situación, pero aún no habían sacado conclusiones definitivas

EE.UU. está siguiendo de cerca la situación con la destrucción de la presa hidroeléctrica de Kajovka, pero aún no puede dar nombres de los culpables, dijo el Coordinador de Comunicaciones del Consejo de Seguridad Nacional de EE.UU., John Kirby, en una sesión informativa.

"Estamos siguiendo de cerca el impacto de esta destrucción", dijo. Preguntado por un periodista sobre quién podría estar implicado en el atentado, Kirby dijo que EEUU no había llegado a conclusiones definitivas sobre lo ocurrido.

El portavoz de la Casa Blanca dijo que Washington había visto informes de la participación rusa en el accidente y estaba "haciendo todo lo posible para evaluar esas pruebas."

Ucrania y los países occidentales han culpado a Rusia de la rotura de la presa. El canal de televisión NBC News citó fuentes según las cuales la administración del presidente estadounidense, Joe Biden, estaba trabajando para desclasificar parte de la información de inteligencia que podría probar la implicación de Rusia en la explosión de la presa hidroeléctrica de Kajovska.

El Kremlin culpó a Kiev del incidente, vinculando el sabotaje a una "ofensiva fallida" de las AFU. El ministro de Defensa, Sergey Shoygu, declaró que el objetivo del sabotaje era impedir que el ejército ruso avanzara en este sector del frente. Ambos países exigieron la convocatoria del Consejo de Seguridad de la ONU en relación con el incidente.